Originalidad hasta en el nombre

ROCK ESTATAL | 04/02/2008

Originalidad hasta en el nombre del grupo. Rockaina trae en su debut discográfico once cortes de «La mejor mierda», como titulan su ópera prima. No inventan nada, pero todo en su primer trabajo suena a fresco a descaro y a ganas de comerse el mundo, musicalmente hablando. (…)

El disco se abre con «Otra canción», pequeña prueba de que las composiciones de la banda se alejan de forma considerable de los estándares manidos del género. Estribillos a varias voces, una base rítmica contundente y guitarras que se deslizan entre la melodía principal de la canción. «Plastilina y religión» repasa las taras con las que crecemos desde pequeños y que coartan nuestra libertad por la doctrina enquistada de la religión. En «Tu minuto» la estructura del tema vuelve a cambiar con partes del texto casi recitadas y una de las guitarras que puntea por encima de la rítmica casi de forma constante, pero el pesimismo acuciante llega hasta a agobiar. Si Rockaina tuviera acceso a las radiofórmulas «La mirada» suena a posible single y no por su comercialidad, desde el punto de vista despectivo, sino porque es uno de los mejores del tema del álbum, estribillo que engancha y canción que rebosa contenido y poesía. Con «Merecidas vacaciones», el grupo enriquece su sonido con una voz femenina en los estribillos y que aligera un tema denso en texto y en música.

Con «Todo lo que tengo», Rockaina recupera la fuerza perdida en el tema anterior, un trallazo sonoro y de adrenalina con puro y genuino rock and roll, con punteos de vieja escuela que aderezan una canción que engancha desde la primera escucha. Y así, el álbum continúa su progresión con otro de los temas que hacen de «La mejor mierda» un disco para escuchar con detenimiento, «Paisaje Nº12» detalla el desprecio que las generaciones mayores tienen hacia la forma de vida de quienes son más jóvenes y optan por ver amanecer trasnochando y no madrugando. Pero es que «Sirenas» es todavía mejor, incluso el tema más destacable del disco. ¿Quién no ha querido establecer una relación seria con alguien que sólo quiere sexo? Pues eso hecho rocanrol, suena desgarrado y penetrante. Una joya. Con «En medio de la oscuridad», Rockaina recuerda la vieja escuela del rock con una estructura y melodías que recuerdan a las grandes bandas de los 70 y algo parecido ocurre también con «¿Qué quieres?» aunque el resultado es algo más repetitivo. «Esta noche lejos» cierra el disco con un medio tiempo que se antoja por debajo de la media global. (…)